viernes, 5 de octubre de 2012

DEMAGOGIA, SECESIONISMO Y POLICIA


Que un personaje como Rubalcaba, actual Secretario General del PSOE y ex ministro de Interior, se dedique a criticar y descalificar públicamente la impecable actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, impidiendo la toma del Congreso y velando por la integridad física de los diputados, constituye una verdadera indecencia moral y dialécticamente. Cabría preguntarse que habría ocurrido en caso de que el grotesco grupo de desalmados lograsen penetrar en el Hemiciclo y cuales sería los comentarios de sus señorías, comenzando por el citado Rubalcaba. Sin el menor género de duda, criticarían al ministro de Interior, crucificarían a la delegada del Gobierno y tacharían de inepta a la policía. El uso y abuso de la demagogia que se está haciendo por parte de la oposición raya en la idiocia, prueba evidente de sus malos resultados en las encuestas.
     Con similar intención manipuladora, Arturo (hasta el año 2000) Mas, en el momento de producirse la firma del documento de convocatoria de elecciones autonómicas, ridículamente filmado con toda pompa, el presidente en funciones, aprovecha para afirmar,  que el Estado “no podrá utilizar las armas” contra el proceso de autodeterminación. Sin duda, catalanes y residentes en Cataluña, deberían agradecerle a su presidente este tipo de tranquilizadoras afirmaciones, para evitarles todo tipo de miedos y temores sobre la posible invasión de su territorio. Incomprensible la sarta de estupideces que  pueden llegar a decirse a cambio de ganar unos comicios y mantenerse en el poder otros cuatro años más. Lo curioso del caso es que en ninguna de las soflamas que este peculiar político les dedica a sus administrados, haga mención de los 700.000 parados y la deuda acumulada de 44.000 millones de euros unido a que por el momento, lo único que les está enviando  el Gobierno de España, son millones de euros para que la Generalidad pueda pagar las nóminas de sus funcionarios y otras deudas. De igual forma, debería contarles  , que motivado por su desastrosa gestión económica, han tenido que solicitar una ayuda superior a  5.000 millones al Fondo  creado para atender a autonomias necesitadas por parte de la Admnistración Central. 
     Don Arturo tendría que explicar que su partido, CiU, siempre se definió como no independentista y además firmó, votó y colaboró en la elaboración de la Constitución, que claramente indica la garantía y el respeto a la ley en todas las CC.AA., incluida Cataluña.
     Con relación a la deriva secesionista catalana y la abstención del PSC, Rubalcaba, a pesar de las circunstancias, ha optado por jugar  la baza nacionalista pero a través del invento del “Estado Federal”. Para remate, resulta torticera la pretendida politización  que supondrá el enfrentamiento Barcelona-Real Madrid, pidiendo a la afición culé que acudan al estadio con banderas independentistas. Tratar de manipular políticamente el futbol hasta ese grado, terminará degradando el bien ganado prestigio de nuestra liga considerada como la mejor del mundo. Esperemos que los primeros 400 millones de euros consignados para socorrer a la Generalidad no los destinen a adquirir las citadas banderitas….
     Es un mal síntoma que cinco sindicatos de policía, entre los cuales figuran los dos más representativos, SUP y CEP, anuncien concentraciones contra el Gobierno, para mostrar su total desacuerdo en función del mal trato que están recibiendo por parte de los políticos, de los que últimamente solo obtienen recortes y promesas incluidas. Un Gobierno que se precie, debe defender a su policía cuando sus actuaciones son correctas y no escudarse en ella para evitar dar explicaciones. Conviene tener presente que tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil, son dos instituciones altamente respetadas, valoradas y consideradas por los españoles, muy por encima del reconocimiento otorgado a los políticos; y con las cosas de comer no se juega….

Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
D.N.I. 02470916A

0 comentarios:

Publicar un comentario

Escribe en libertad y sin censuras