Pablo Iglesias, Secretario General de Podemos, según comentarios filtrados por sus propios compañeros, está pasando tremendas dificultades tratando de convertir a su partido en una opción de gobierno. Su famoso “asalto a los cielos”, que no deja de ser una imbecilidad más, en opinión de varios analistas políticos se limitará a ocupar el espacio que anteriormente pertenecía a Izquierda Unida (IU), razón por la cual la formación comunista deberá mantener la calma y continuar con su programa.
Al parecer, dicho político vive sumido en permanentes controversias con sus íntimos, comenzando por Errejón, en lo que respecta a las próximas elecciones municipales, unido a las diferencias existentes en torno a la denegación o colaboración con Susana Díaz (PSOE), para que pueda ser investida como presidenta de la Junta de Andalucía. La pérdida del control sobre las agrupaciones autonómicas y locales es manifiesto, dado que Podemos carece de un equipo de cuadros compacto y debidamente coordinado para poner orden en algo que se está que se les está yendo de las manos por momentos.
La variopinta nomenclatura de Podemos, Juntos Podemos, Ahora si Podemos, y un largo etcétera, está suponiendo un galimatías que genera equívocos hasta convertirlo en un partido multiusos, en el que la principal aspiración de sus militantes consiste en lograr un puesto de concejal o diputado autonómico, lo que supone el cobrar un sueldo fijo durante los próximos cuatro años.
Para ciertos militantes de Podemos con más criterio y formación, y así lo han manifestado, lo acertado habría sido olvidarse de autonómicas y municipales en el 2015 y concentrar todas las energías en lograr un buen número de diputados y una vez instalados en el Congreso, con un cuatrienio por delante, ir eligiendo, seleccionado y formando candidatos para los próximos comicios, pero siempre siguiendo unas mismas directrices perfectamente definidas y marcadas desde la dirección central del partido, y no a través de los famosos círculos (circos en algunos casos), donde cada uno dice y hace lo que le da la gana, proyectando una imagen grotesca carente de seriedad que solo consigue dañar la imagen del partido como está sucediendo. Por el momento lo prioritario sería crear y conseguir coherencia de decisiones y no el escenario de casa de locos que están ofreciendo.
Las últimas encuestas, coincidiendo con lo esperado, comienzan a señalar la inevitable caída de Podemos. El primer aviso oficial apareció con los resultados obtenidos en las pasadas elecciones autonómicas andaluzas, demostrándose que las expectativas, tanto por parte de los sondeos de opinión como las del propio líder de la formación, entre 24 y 26 escaños, no coincidieron para nada con los 15 escaños conseguidos.
La segunda confirmación del descenso anunciado se producirá tras los resultados de municipales y autonómicas del 24 de mayo, para rematar con la traca de las generales en las que se demostrará fehacientemente que los ciudadanos, cuando está en juego el Gobierno de la nación son lo suficientemente serios en sus decisiones huyendo de descarados populismos y el cocinado de resultados en las encuestas. Tiempo al tiempo.
Sobre el inoportuno regalo al Rey, por fin Pablo Iglesias consiguió el perseguido objetivo, consistente en fotografiarse con Felipe VI, amparándose en la ridícula disculpa de obsequiarle con la seria "Juegos de tronos", para que el Monarca tome nota " entre un viejo mundo que se desmorona y la aparición de viejos líderes con nuevas ideas". Un escenario según el propio Iglesias muy parecido al vivido en España actualmente sobre el que el Rey deberá tomar para entender la política española.
Tales bufonadas evocan la gloriosa época creativa del anterior presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con su famosa aportación bautizada con el pomposo título de "La Alianza delas Civilizaciones", que todavía continúa siendo tratada y estudiada en los foros intelectuales más prestigiosos del mundo, así como sus posteriores meditaciones en torno a "la cuantificación de las nubes". Cuestiones todas ellas muy comentadas en la reciente cena mantenida en casa del ex ministro Bono, con la asistencia del citado ZP y como no, del líder podemista.
No obstante es de justicia reconocer que Iglesias demostró una vez más su dominio estratégico de los medios, cuyo éxito consistía en ser portada de la mayoría de los periódicos nacionales y noticia en otros muchos extranjeros, lo que consiguió incomprensiblemente aunque solo se trate de una anécdota sin la más mínima transcendencia.
Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
D.N.I. 02470916A
jueves, 23 de abril de 2015
martes, 21 de abril de 2015
OTRO ESCÁNDALO mas CON REPERCUSIÓN INTERNACIONAL
Totalmente incierto que estemos llegando al final de una era cuando todavía es mucha la porquería pendiente de aflorar sin tener en cuenta los casos de personajes agazapados que, sin haber ostentado cargos rimbombantes como Rodrigo Rato, han erosionado igualmente los masacrados bolsillos de los españoles. Lo que ya nadie cuestiona es que nuestra bien ganada fama de corruptos y defraudadores ha traspasado todas las fronteras. Algo perfectamente demostrable con un simple vistazo a los titulares de la prensa extranjera.
Tal estado de putrefacción de personas e instituciones justifica totalmente la total desafección de nuestra preparada juventud sobre los políticos y sus tenebrosas maquinaciones para apropiarse de lo ajeno, ejerciendo y proyectando una codicia de lo más insaciable y repugnante.
Corrupción y corruptos, es la plaga que lacera y agobia nuestros país de norte a sur y de este a oeste. El presunto comportamiento vergonzoso y amoral de todo un ex vicepresidente del Gobierno Español, detenido por delito fiscal, blanqueo y alzamiento de bienes, dice muy poco a favor de nuestros personajes públicos. Imaginamos que a partir de esta detención, del nada menos que ex presidente del Fondo Monetario Internacional (FMI), obligará a que los organismos supranacionales, antes de proceder al nombramiento de un político español lo mediten detenidamente.
La noticia sobre la detención de Rato supondrá que una vez más debamos tragarnos el manido discurso de los voceros populares, comentando que se trata de una dolorosa excepción, dado que como todos conocemos, la gran mayoría de los responsables de la formación conservadora goza de una honestidad incuestionable a la que lo único que les ocupa y preocupa es el bienestar de los españoles.
El auténtico problema es que a la sociedad ya comienza a resultarle desagradable el tener que acudir a las urnas y depositar su voto sobre unas listas confeccionadas por unos políticos que les merecen confianza cero, descubriéndose ahora que al citado Sr. Rato desde hace un año ya era un elemento sospechoso para la Agencia Tributaria.
Actualmente, cuando la nave del PP está a punto de naufragar, tratarán por todos los medios de evitar el desastre martirizándonos con los mantras de siempre: “habrá que realizar una limpieza a fondo”, “se trata de casos aislados que habrá que erradicar” y un largo etcétera que nadie se traga. Es preciso recordar que según varios estudios sobre la corrupción, solo se descubre un 10% de la que realmente existe, con lo cual preparémonos para la que se nos viene encima. Sin la menor duda, pronto surgirán nuevos casos como ocurre en todas las campañas electorales para acusar al contrario, sin olvidar que los chivatazos ahora están excelentemente retribuidos.
Para mayor escarnio, conviene recordar que fue precisamente el ministro Rato quien materializó una dura batalla contra el fraude fiscal, que ya tiene cigotos el tema….Comprendemos sus disgusto por la acusación de la Fiscalía y el tener que presenciar el registro de sus domicilios, que efectivamente se podrían haber realizado con mayor discreción, si bien debe comprender que lo que menos inspira en estos momentos su persona es precisamente comprensión sino todo lo contrario.
Ahora, habrá que preguntarse, como se cuestionaba ayer en las distintas tertulias, si don Mariano tenía noticias de lo que se estaba cociendo o se enteró por la prensa. Reconociéndole a Rodrigo Rato su derecho a la presunción de inocencia, lo que no deja lugar a dudas es que el tribunal político y la pena del telediario, tras el numerito de ayer ya le han juzgado, pudiendo imaginar lo que piensa el pueblo, es decir, nosotros.
Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
D.N.I. 02470916A
Tal estado de putrefacción de personas e instituciones justifica totalmente la total desafección de nuestra preparada juventud sobre los políticos y sus tenebrosas maquinaciones para apropiarse de lo ajeno, ejerciendo y proyectando una codicia de lo más insaciable y repugnante.
Corrupción y corruptos, es la plaga que lacera y agobia nuestros país de norte a sur y de este a oeste. El presunto comportamiento vergonzoso y amoral de todo un ex vicepresidente del Gobierno Español, detenido por delito fiscal, blanqueo y alzamiento de bienes, dice muy poco a favor de nuestros personajes públicos. Imaginamos que a partir de esta detención, del nada menos que ex presidente del Fondo Monetario Internacional (FMI), obligará a que los organismos supranacionales, antes de proceder al nombramiento de un político español lo mediten detenidamente.
La noticia sobre la detención de Rato supondrá que una vez más debamos tragarnos el manido discurso de los voceros populares, comentando que se trata de una dolorosa excepción, dado que como todos conocemos, la gran mayoría de los responsables de la formación conservadora goza de una honestidad incuestionable a la que lo único que les ocupa y preocupa es el bienestar de los españoles.
El auténtico problema es que a la sociedad ya comienza a resultarle desagradable el tener que acudir a las urnas y depositar su voto sobre unas listas confeccionadas por unos políticos que les merecen confianza cero, descubriéndose ahora que al citado Sr. Rato desde hace un año ya era un elemento sospechoso para la Agencia Tributaria.
Actualmente, cuando la nave del PP está a punto de naufragar, tratarán por todos los medios de evitar el desastre martirizándonos con los mantras de siempre: “habrá que realizar una limpieza a fondo”, “se trata de casos aislados que habrá que erradicar” y un largo etcétera que nadie se traga. Es preciso recordar que según varios estudios sobre la corrupción, solo se descubre un 10% de la que realmente existe, con lo cual preparémonos para la que se nos viene encima. Sin la menor duda, pronto surgirán nuevos casos como ocurre en todas las campañas electorales para acusar al contrario, sin olvidar que los chivatazos ahora están excelentemente retribuidos.
Para mayor escarnio, conviene recordar que fue precisamente el ministro Rato quien materializó una dura batalla contra el fraude fiscal, que ya tiene cigotos el tema….Comprendemos sus disgusto por la acusación de la Fiscalía y el tener que presenciar el registro de sus domicilios, que efectivamente se podrían haber realizado con mayor discreción, si bien debe comprender que lo que menos inspira en estos momentos su persona es precisamente comprensión sino todo lo contrario.
Ahora, habrá que preguntarse, como se cuestionaba ayer en las distintas tertulias, si don Mariano tenía noticias de lo que se estaba cociendo o se enteró por la prensa. Reconociéndole a Rodrigo Rato su derecho a la presunción de inocencia, lo que no deja lugar a dudas es que el tribunal político y la pena del telediario, tras el numerito de ayer ya le han juzgado, pudiendo imaginar lo que piensa el pueblo, es decir, nosotros.
Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
D.N.I. 02470916A
Tanto el PP como los restantes partidos, en las actuales circunstancias, tendrán que asumir la cultura de los pactos con la más que posible desaparición de las mayorías absolutas en las próximas elecciones municipales, autonómicas y generales, única forma eficaz para intentar erradicar, o al menos controlar el cáncer de la corrupción en su múltiples facetas, siendo los ciudadanos los primeros beneficiados, siempre y cuando los nuevos grupos políticas que se incorporen para la formación de gobierno mantengan limpia su trayectoria y no se presten a los clásicos enjuagues con posterioridad al pacto.
Concretamente en el Partido Popular, muy al contrario de lo que piensan algunos de sus dirigentes, La pérdida de votos tal como ocurrió en las pasadas elecciones andaluzas y vaticinan todos los sondeos de cara a las restantes, no obedece ni se les castiga exclusivamente por los recortes, sino por la insufrible ausencia de decisiones eficaces respecto a los casos de manifiesta deshonestidad, tapando, mintiendo y negando todo lo que han podido y que oliese a corrupción. Nada más repudiable por ejemplo que mantener en el Gobierno a personajes como Ana Mato o la reciente aparición del caso “Púnica” organizado y controlado por el indeseable Francisco Granados, en presidio desde hace meses y con el descaro de que nadie supiese y menos denunciase lo que estaba sucediendo. Todo ello sin tener en cuenta la tenebrosa trama Gurtel, retribuciones paralelas (sobres), dobles contabilidades y un largo etcétera, delitos sobre los que los españoles no perdemos la esperanza de que algún día sean juzgados y encarcelados todos los responsables de semejantes latrocinios y devuelvan lo robado.
A ministros y altos cargos del partido, como es lógico, ante tan oscuro panorama comienza a preocuparles no solo los nefastos resultados cosechados en los comicios andaluces sino lo que acaecerá con las restantes confrontaciones electorales, lo que les obliga a estar más pendientes de las encuestas que de sus respectivos cometidos. Son miles de puestos los que están en juego y la sola idea de tener que abandonar sus poltronas y pasar a la oposición les resulta crispante, familias incluidas, comenzando por el propio Mariano Rajoy que sigue empecinado y convencido de que la mejor política pasa por “no hacer nada”, insistiendo en que con la consolidación de la recuperación económica será suficiente para triunfar nuevamente en las generales, negándose a que sus subordinados se planteen la profunda casuística del porque no reciben el apoyo de los votantes. Ahora resulta, burda justificación, que ello es debido a un problema de comunicación, mantra que repiten todos cuan loros amaestrados en sus apariciones públicas, tal como se les tiene ordenado pero matizando que tal defecto ya está en vías de subsanarse…
En la última reunión de la Junta Directiva del PP, convención de figurantes sometidos al aplausómetro (aparato que mide con total exactitud la intensidad y duración del aplauso por zonas), acudieron los 600 notables de la formación conservadora para ovacionar a un líder en el que ya no creen pero temen. La frase de que “hay que distinguir entre lo importante de lo que no lo es” en boca de un aspirante a otros cuatros años en La Moncloa, produjo sonrojo y perfectamente asimilable a aquella otra que reza “detrás del último no va nadie”. Tales imbecilidades solo sirven para pronosticar un posible desastre. Para los barones, miembros del Gobierno y cargos del partido, con Dolores Cospedal García a la cabeza, el escuchar otra vez más lo que ha supuesto el milagro económico y la creación de puestos de trabajo, algo en lo que por lo visto no han intervenido nuestros sufridos empresarios, verdaderos aretífices de la recuperación que pretenden apropiarse los políticos, lo escuchan con fruición y poniendo cara de haber sido sorprendidos con tal noticia se miran unos a otros en señal de reconocimiento y aquiescencia, encantados de haberse conocido, pero sin que a nadie se le ocurriera pedir la palabra para citar a nuestros cuatro millones y medio de parados más la legión de jóvenes magníficamente preparados que no encuentran trabajo en su país y están emigrando por miles. Los cónclaves de mudos, entre otros, sufren este tipo de inconvenientes.
El déficit del presidente y su Gobierno, donde nadie se atreve a manifestarse salvo raras excepciones, consiste en carecer de una política adecuada, ambiciosa y de calidad para afrontar la próxima legislatura y los desafíos que ello conlleva. Atacar Ciudadanos cuando es un secreto a voces que los propios barones: Aguirre, Bouzá, Monago, Fabra, etc. Están preparando sus planes para alcanzar acuerdos postelectorales, constituye una solemne idiotez, cuando se trata de una formación que comparte valores democráticos y objetivos muy similares, con los que habrá que contar para poder gobernar muy posiblemente a partir del 2016. ¡¡Tiempo al tiempo!!
Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
DNI 02470916A
Concretamente en el Partido Popular, muy al contrario de lo que piensan algunos de sus dirigentes, La pérdida de votos tal como ocurrió en las pasadas elecciones andaluzas y vaticinan todos los sondeos de cara a las restantes, no obedece ni se les castiga exclusivamente por los recortes, sino por la insufrible ausencia de decisiones eficaces respecto a los casos de manifiesta deshonestidad, tapando, mintiendo y negando todo lo que han podido y que oliese a corrupción. Nada más repudiable por ejemplo que mantener en el Gobierno a personajes como Ana Mato o la reciente aparición del caso “Púnica” organizado y controlado por el indeseable Francisco Granados, en presidio desde hace meses y con el descaro de que nadie supiese y menos denunciase lo que estaba sucediendo. Todo ello sin tener en cuenta la tenebrosa trama Gurtel, retribuciones paralelas (sobres), dobles contabilidades y un largo etcétera, delitos sobre los que los españoles no perdemos la esperanza de que algún día sean juzgados y encarcelados todos los responsables de semejantes latrocinios y devuelvan lo robado.
A ministros y altos cargos del partido, como es lógico, ante tan oscuro panorama comienza a preocuparles no solo los nefastos resultados cosechados en los comicios andaluces sino lo que acaecerá con las restantes confrontaciones electorales, lo que les obliga a estar más pendientes de las encuestas que de sus respectivos cometidos. Son miles de puestos los que están en juego y la sola idea de tener que abandonar sus poltronas y pasar a la oposición les resulta crispante, familias incluidas, comenzando por el propio Mariano Rajoy que sigue empecinado y convencido de que la mejor política pasa por “no hacer nada”, insistiendo en que con la consolidación de la recuperación económica será suficiente para triunfar nuevamente en las generales, negándose a que sus subordinados se planteen la profunda casuística del porque no reciben el apoyo de los votantes. Ahora resulta, burda justificación, que ello es debido a un problema de comunicación, mantra que repiten todos cuan loros amaestrados en sus apariciones públicas, tal como se les tiene ordenado pero matizando que tal defecto ya está en vías de subsanarse…
En la última reunión de la Junta Directiva del PP, convención de figurantes sometidos al aplausómetro (aparato que mide con total exactitud la intensidad y duración del aplauso por zonas), acudieron los 600 notables de la formación conservadora para ovacionar a un líder en el que ya no creen pero temen. La frase de que “hay que distinguir entre lo importante de lo que no lo es” en boca de un aspirante a otros cuatros años en La Moncloa, produjo sonrojo y perfectamente asimilable a aquella otra que reza “detrás del último no va nadie”. Tales imbecilidades solo sirven para pronosticar un posible desastre. Para los barones, miembros del Gobierno y cargos del partido, con Dolores Cospedal García a la cabeza, el escuchar otra vez más lo que ha supuesto el milagro económico y la creación de puestos de trabajo, algo en lo que por lo visto no han intervenido nuestros sufridos empresarios, verdaderos aretífices de la recuperación que pretenden apropiarse los políticos, lo escuchan con fruición y poniendo cara de haber sido sorprendidos con tal noticia se miran unos a otros en señal de reconocimiento y aquiescencia, encantados de haberse conocido, pero sin que a nadie se le ocurriera pedir la palabra para citar a nuestros cuatro millones y medio de parados más la legión de jóvenes magníficamente preparados que no encuentran trabajo en su país y están emigrando por miles. Los cónclaves de mudos, entre otros, sufren este tipo de inconvenientes.
El déficit del presidente y su Gobierno, donde nadie se atreve a manifestarse salvo raras excepciones, consiste en carecer de una política adecuada, ambiciosa y de calidad para afrontar la próxima legislatura y los desafíos que ello conlleva. Atacar Ciudadanos cuando es un secreto a voces que los propios barones: Aguirre, Bouzá, Monago, Fabra, etc. Están preparando sus planes para alcanzar acuerdos postelectorales, constituye una solemne idiotez, cuando se trata de una formación que comparte valores democráticos y objetivos muy similares, con los que habrá que contar para poder gobernar muy posiblemente a partir del 2016. ¡¡Tiempo al tiempo!!
Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
DNI 02470916A
domingo, 19 de abril de 2015
SERIAS DESAVENENCIAS EN PODEMOS
Si como todo parece indicar, Podemos pacta con el PSOE la investidura de Susana Díaz, en contra de la opinión y marginando a su candidata Teresa Rodríguez, cometerá un error garrafal y la consiguiente desafección de sus bases, poniéndose de manifiesto que ejercen el engaño con el mismo descaro que los partidos a los que definen como casta. Más temprano que tarde, muchos de sus afiliados, votantes y simpatizantes comprobarán que entre lo prometido por sus líderes en campaña y lo pactado posteriormente, todo parecido es mera coincidencia.
La mayoría de sus dirigentes, ambiciosos por naturaleza, lo que verdaderamente les ocupa y preocupa es acceder cuanto antes a un carguito, a poder ser con despacho, pisar moqueta y disponer de secretaria. Todo lo que tanto han criticado y envidiado pero que forma parte de sus sueños, ya que de pasar miseria están hasta los mismísimos cigotos.
Paradójicamente y extrapolando las citadas reflexiones a la cruda realidad, nos encontramos con que quienes más duramente criticaron a Podemos, es decir el PSOE, dolidos por el elevado porcentaje de votos perdidos, se ven en la necesidad de alcanzar algún tipo de acuerdo con la formación de Pablo Iglesias, para que la mencionada Susana Díaz logre ser investida como Presidenta de la Junta de Andalucía, siempre y cuando no lo consigan pactando con las restantes fuerzas del arco parlamentario.
Según parece, el líder de Podemos, primer vituperador de la casta, ya no considera ni le causan tanta repugnancia los partidos que la forman como vociferaba en todos sus mítines, modificando su comportamiento hasta el grado de mostrar cierta predisposición a negociar con los socialistas y habiendo nombrado para tal menester a su secretario de Organización, Sergio Pascual, y separando a Teresa Rodríguez, cabeza de lista en los pasados comicios andaluces.
Lo más sorprendente por parte de Podemos ha sido el pasar de una postura totalmente crítica con el PSOE, a una segunda mucho más moderada y receptiva. Lo que hace suponer que se produzca una abstención en primera o segunda votación para favorecer el trámite de la investidura de la candidata socialista, todo lo cual ha originado un serio conflicto entre la dirección nacional y el grupo parlamentario andaluz que Podemos intenta suavizar, si bien los enfrentamientos ya son públicos desde el pasado lunes habiéndose creado una imagen totalmente negativa.
A lo largo de estos días Teresa ha caído de su particular e inocente guindo, llegando a la conclusión de que su partido no tiene nada de especial respecto a los restantes, con lo cual su misión consistirá en someterse a las órdenes de su jefe, quien le ha explicado que las decisiones sobre el voto en Andalucía excede a la política regional, para convertirse en algo estratégicamente distinto. La historia de las acampadas y otras movidas ya pasaron y ahora lo que corresponde es hacer política, reunirse, discutir, negociar, ceder, ganar, perder, etc. En una palabra, pasar a formar parte de la “casta” pero proyectando una imagen distinta, disimulando y sin que se note demasiado….que en el fondo no sirve para nada ya que terminarán acusándote de ser tan golfo y corrupto como los dirigentes de los restantes partidos.
Todavía no se conoce en que quedarán las desavenencias entre la dirección nacional del partido y el grupo de parlamentarios electos, si bien lo que resulta inocultable es que en el seno de Podemos se está solicitando insistentemente la celebración de una consulta a las bases para decidir la postura definitiva, aunque al final una gran mayoría están convencidos de que Teresa Rodríguez será apartada del debate y desoídas las bases, imponiéndose el criterio de la cúpula. No obstante, para otros esta discrepancia ha quedado cerrada en falso y como siempre tendrá sus consecuencias.
La realidad es que a efectos electorales las cosas no salieron como habían calculado, ni es lo mismo esperar obtener entre 23 y 25 escaños y quedarse en 15. La propia Teresa Rodríguez, dejándose llevar por su inexperiencia y ramplón discurso, repitió en diversas ocasiones durante la campaña la desafortunada frase de "No solo podemos, sino que debemos ganar en Andalucía", demostrando un total desconocimiento de sus paisanos. Esta bisoña política, sin duda debe vigilar su lenguaje y realizar cuanto antes un curso de oratoria efectiva.
Los españoles necesitamos acostunbrarnos a pensar que en política los milagros no existen e igualmente aprender a convivir y considerar a Podemos como un partido más, que irrumpió con mucha fuerza, entre otras razones por contarle a los ciudadanos, entrando en sus hogares via TV, lo que estos necesitaban oir y prometiendo imposibles a través de fórmulas mágicas que ellos mismos han ido rectificando y recortando desde hace varios meses. La formación de Iglesias ha ido perdiendo fuerza en la misma proporción que han ido creciendo los incrédulos, tal como se ha demostrado con el fracaso en las elecciones andaluzas donde sus expectativas eran muy superiores a los 15 escaños obtenidos. En breve comenzarán a producirse bajas de afiliados que retornarán a sus partidos de oriegen, y muy posiblemente tal regreso lo inicien en primer lugar los militantes de IU seguidos por los del PSOE. ¡¡Tiempo al tiempo!!
Que a estas alturas de siglo un lider político pretenda "convertir a España en un paraiso de igualdad social, de energia verde, de pulcritud institucional y de empleo asegurado" debe ser canonizado en vida sin pasar por las etapas de venerable y beato si el proceso continúa siendo el mismo....
Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
D.N.I. 02470916A
La mayoría de sus dirigentes, ambiciosos por naturaleza, lo que verdaderamente les ocupa y preocupa es acceder cuanto antes a un carguito, a poder ser con despacho, pisar moqueta y disponer de secretaria. Todo lo que tanto han criticado y envidiado pero que forma parte de sus sueños, ya que de pasar miseria están hasta los mismísimos cigotos.
Paradójicamente y extrapolando las citadas reflexiones a la cruda realidad, nos encontramos con que quienes más duramente criticaron a Podemos, es decir el PSOE, dolidos por el elevado porcentaje de votos perdidos, se ven en la necesidad de alcanzar algún tipo de acuerdo con la formación de Pablo Iglesias, para que la mencionada Susana Díaz logre ser investida como Presidenta de la Junta de Andalucía, siempre y cuando no lo consigan pactando con las restantes fuerzas del arco parlamentario.
Según parece, el líder de Podemos, primer vituperador de la casta, ya no considera ni le causan tanta repugnancia los partidos que la forman como vociferaba en todos sus mítines, modificando su comportamiento hasta el grado de mostrar cierta predisposición a negociar con los socialistas y habiendo nombrado para tal menester a su secretario de Organización, Sergio Pascual, y separando a Teresa Rodríguez, cabeza de lista en los pasados comicios andaluces.
Lo más sorprendente por parte de Podemos ha sido el pasar de una postura totalmente crítica con el PSOE, a una segunda mucho más moderada y receptiva. Lo que hace suponer que se produzca una abstención en primera o segunda votación para favorecer el trámite de la investidura de la candidata socialista, todo lo cual ha originado un serio conflicto entre la dirección nacional y el grupo parlamentario andaluz que Podemos intenta suavizar, si bien los enfrentamientos ya son públicos desde el pasado lunes habiéndose creado una imagen totalmente negativa.
A lo largo de estos días Teresa ha caído de su particular e inocente guindo, llegando a la conclusión de que su partido no tiene nada de especial respecto a los restantes, con lo cual su misión consistirá en someterse a las órdenes de su jefe, quien le ha explicado que las decisiones sobre el voto en Andalucía excede a la política regional, para convertirse en algo estratégicamente distinto. La historia de las acampadas y otras movidas ya pasaron y ahora lo que corresponde es hacer política, reunirse, discutir, negociar, ceder, ganar, perder, etc. En una palabra, pasar a formar parte de la “casta” pero proyectando una imagen distinta, disimulando y sin que se note demasiado….que en el fondo no sirve para nada ya que terminarán acusándote de ser tan golfo y corrupto como los dirigentes de los restantes partidos.
Todavía no se conoce en que quedarán las desavenencias entre la dirección nacional del partido y el grupo de parlamentarios electos, si bien lo que resulta inocultable es que en el seno de Podemos se está solicitando insistentemente la celebración de una consulta a las bases para decidir la postura definitiva, aunque al final una gran mayoría están convencidos de que Teresa Rodríguez será apartada del debate y desoídas las bases, imponiéndose el criterio de la cúpula. No obstante, para otros esta discrepancia ha quedado cerrada en falso y como siempre tendrá sus consecuencias.
La realidad es que a efectos electorales las cosas no salieron como habían calculado, ni es lo mismo esperar obtener entre 23 y 25 escaños y quedarse en 15. La propia Teresa Rodríguez, dejándose llevar por su inexperiencia y ramplón discurso, repitió en diversas ocasiones durante la campaña la desafortunada frase de "No solo podemos, sino que debemos ganar en Andalucía", demostrando un total desconocimiento de sus paisanos. Esta bisoña política, sin duda debe vigilar su lenguaje y realizar cuanto antes un curso de oratoria efectiva.
Los españoles necesitamos acostunbrarnos a pensar que en política los milagros no existen e igualmente aprender a convivir y considerar a Podemos como un partido más, que irrumpió con mucha fuerza, entre otras razones por contarle a los ciudadanos, entrando en sus hogares via TV, lo que estos necesitaban oir y prometiendo imposibles a través de fórmulas mágicas que ellos mismos han ido rectificando y recortando desde hace varios meses. La formación de Iglesias ha ido perdiendo fuerza en la misma proporción que han ido creciendo los incrédulos, tal como se ha demostrado con el fracaso en las elecciones andaluzas donde sus expectativas eran muy superiores a los 15 escaños obtenidos. En breve comenzarán a producirse bajas de afiliados que retornarán a sus partidos de oriegen, y muy posiblemente tal regreso lo inicien en primer lugar los militantes de IU seguidos por los del PSOE. ¡¡Tiempo al tiempo!!
Que a estas alturas de siglo un lider político pretenda "convertir a España en un paraiso de igualdad social, de energia verde, de pulcritud institucional y de empleo asegurado" debe ser canonizado en vida sin pasar por las etapas de venerable y beato si el proceso continúa siendo el mismo....
Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
D.N.I. 02470916A
jueves, 16 de abril de 2015
HARTAZGO Y CINISMO DE LA PASADA CAMPAÑA ELECTORAL (Elecciones andaluzas)
Cuando todavía los sesudos analistas, asesores, barones, diputados y toda la tropa dedicada a la “res pública”, continúa analizando las consecuencias y secuelas de las pasadas elecciones andaluzas, ya nos encontramos inmersos en la precampaña de los próximos comicios municipales y autonómicos a celebrar en mayo.
Ha sido muy fuerte la paliza adjudicada por los políticos a la ciudadanía a través de mítines, prensa, radio, TV, debates y tertulias, pero lo mas deplorable es ver a ciertos personajes como se transforman en campaña electoral, se les cambia el gesto y no renuncian a fotografiarse con quien sea y cuantas veces se lo soliciten, repartiendo abrazos, tanto a niños como a ancianas con tal cara de felicidad, que no otorgarles el voto sería como una especie de canallada.
Actualmente ya ninguno utiliza corbata, incluidos los pertenecientes a formaciones conservadoras y como no, todos aplauden y levantan los brazos, con la única diferencia de que unos cierran el puño y otros muestran la mano abierta.
Si nos centramos en los mítines, los distintos oradores nos regalan la mejor de sus sonrisas y con la camisa remangada, permitiéndose incluso toda clase de gracietas y chascarrillos sobre los líderes del partido contrario, que en ciertas ocasiones se convierten en insultos y descalificaciones. En algunos casos, por aquello de interactuar con sus entregados simpatizantes, se permiten la licencia de preguntar al auditorio cuestiones como..¿Vosotros sabéis quienes son los que se están cargando la sanidad y la educación de nuestros hijos? En fin, todo un canto a la más burda y descarada hipocresía, gritándole a los asistentes hasta ensordecerlos, destacando en cuanto al tono empleado la presidenta de la Junta con su pobre y discurso.
Lo más triste del caso es que una vez realizados el escrutinio y conocidos los resultados, la vida retorna a la normalidad, nada o muy poco cambiará y los que ya vivían holgadamente seguirán haciéndolo, mientras que aquellos que padecen penalidades, comprobarán que su voto no ha servido para nada, es decir, que seguirán ejerciendo de miserables.
Como última consideración sobre la la reciente confrontación, aclarar que la victoria de Susana Díaz (PSOE), tiene tanto de dulce como de amarga, dado que al no haber obtenido la mayoría absoluta para gobernar, va a tener que afrontar grandes dificultades con su investidura y ya veremos a que precio. En cuanto a Podemos, cuenten lo que cuenten, la única verdad es que con los 15 escaños obtenidos les han colocado en su sitio, muy lejos de las expectativas de los sondeos de opinión como el CIS que les adjudicó 22 diputados o los 25 pronosticados por Pablo Iglesias. Los mismos que esperaba o alguno más su candidata en Andalucía, Teresa Rodríguez, cuyo rostro reflejaba perfectamente la merecida decepción, que será más dura en las futuras elecciones municipales y autonómicas. ¡¡Tiempo al tiempo!!
Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
D.N.I. 02470916A
Ha sido muy fuerte la paliza adjudicada por los políticos a la ciudadanía a través de mítines, prensa, radio, TV, debates y tertulias, pero lo mas deplorable es ver a ciertos personajes como se transforman en campaña electoral, se les cambia el gesto y no renuncian a fotografiarse con quien sea y cuantas veces se lo soliciten, repartiendo abrazos, tanto a niños como a ancianas con tal cara de felicidad, que no otorgarles el voto sería como una especie de canallada.
Actualmente ya ninguno utiliza corbata, incluidos los pertenecientes a formaciones conservadoras y como no, todos aplauden y levantan los brazos, con la única diferencia de que unos cierran el puño y otros muestran la mano abierta.
Si nos centramos en los mítines, los distintos oradores nos regalan la mejor de sus sonrisas y con la camisa remangada, permitiéndose incluso toda clase de gracietas y chascarrillos sobre los líderes del partido contrario, que en ciertas ocasiones se convierten en insultos y descalificaciones. En algunos casos, por aquello de interactuar con sus entregados simpatizantes, se permiten la licencia de preguntar al auditorio cuestiones como..¿Vosotros sabéis quienes son los que se están cargando la sanidad y la educación de nuestros hijos? En fin, todo un canto a la más burda y descarada hipocresía, gritándole a los asistentes hasta ensordecerlos, destacando en cuanto al tono empleado la presidenta de la Junta con su pobre y discurso.
Lo más triste del caso es que una vez realizados el escrutinio y conocidos los resultados, la vida retorna a la normalidad, nada o muy poco cambiará y los que ya vivían holgadamente seguirán haciéndolo, mientras que aquellos que padecen penalidades, comprobarán que su voto no ha servido para nada, es decir, que seguirán ejerciendo de miserables.
Como última consideración sobre la la reciente confrontación, aclarar que la victoria de Susana Díaz (PSOE), tiene tanto de dulce como de amarga, dado que al no haber obtenido la mayoría absoluta para gobernar, va a tener que afrontar grandes dificultades con su investidura y ya veremos a que precio. En cuanto a Podemos, cuenten lo que cuenten, la única verdad es que con los 15 escaños obtenidos les han colocado en su sitio, muy lejos de las expectativas de los sondeos de opinión como el CIS que les adjudicó 22 diputados o los 25 pronosticados por Pablo Iglesias. Los mismos que esperaba o alguno más su candidata en Andalucía, Teresa Rodríguez, cuyo rostro reflejaba perfectamente la merecida decepción, que será más dura en las futuras elecciones municipales y autonómicas. ¡¡Tiempo al tiempo!!
Atentamente.
José-Tomás Cruz Varela
D.N.I. 02470916A
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